El despido de 300 trabajadores anunciado por la empresa propiedad de Marcelo Figueroa y Daniel Rodríguez en realidad pone de manifiesto su intento por reducir el número de empleados -y, por consiguiente, aumentar su explotación-, y, sobre todo, encubre sus pretensiones de acceder a permisos pesqueros. Para ello, se utiliza como carne de cañón a cientos de familias obreras. ¿Qué hará el STIA?
Por Iván Marín
“Cuesta
creer que la empresa esté en crisis porque estamos en plena temporada de
Nación. Sabemos que no es una muy buena temporada como años anteriores pero es
una empresa que cuando mete materia prima te mete 4 o 5 mil cajones diarios,
tiene la capacidad como para poder trabajarlos, tiene la capacidad para
congelarlos. Es imposible trabajar tanta cantidad de materia prima con 35
operarios, como ellos dicen”, señaló a Prosa Urgente este martes por la tarde
Juan, delegado de los trabajadores de FYRSA, en respuesta a un comunicado de la
empresa en donde informó el despido de 300 obreros de la pesquera de la ciudad
de Rawson.
Quienes
figuran como dueños de la empresa son Marcelo Figueroa y Daniel Rodríguez, y en
un comunicado firmado por Tamara Heintz, apoderada de la firma, aducen que "La
empresa puede funcionar con 35 empleados, pero por presiones del sindicato
actualmente cuenta con 300 empleados fijos con contrato por tiempo
indeterminado, con una antigüedad que va de 1 a 12 años”. Y a eso agregan falta
de materia prima.
Los
embustes tienen patas cortas. Una parte importante de los trabajadores son
contratados por temporada y de los efectivos una porción considerable recién
fue blanqueada en 2020, luego de una lucha enorme en plena cuarentana por la
pandemia de Covid-19. Es claro que la empresa pretende un recorte de personal y
una mayor explotación de sus trabajadores para ampliar sus ganancias. Respecto
a la supuesta escasez de materia prima no es más que una de las recurrentes
maniobras de las patronales del sector en la zona para avanzar en permisos
pesqueros.
Hay que decirlo con todas las letras: con la excusa de un supuesto cierre, estamos ante un intento de reestructuración de la empresa en detrimento de derechos y conquistas laborales, que además implica una profundización en la depredación de los recursos marítimos, en este caso la merluza, el langostino y el calamar. De máxima, Figueroa y Rodríguez pretenden despedir a los obreros y luego volver a tomar un número reducido de ellos sin antigüedad y, de mínima, al menos sacarse de encima algunas decenas de trabajadores.
El
triunfo de la lucha solo se logrará con la unidad de los trabajadores
El miércoles de la semana pasada los obreros y obreras de FYRSA comenzaron un bloqueo de la planta en reclamo, entre otros puntos, de salarios, aguinaldos y vacaciones adeudadas. Ante la falta de respuesta de la patronal, el lunes decidieron su ocupación y ayer por la mañana la empresa comunicó el despido de los 300 trabajadores. La última quincena que cobraron fue el 20 de junio
Un triunfo de las pretensiones patronales no puede obtenerse sin la complicidad de la conducción del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA). Por eso se hace imprescindible que los trabajadores estén unidos y atentos al accionar de la conducción sindical. Un dato no menor: la firma logró sacar entre 7 y 8 camiones de materia prima sin que la conducción del sindicato alertara a los obreros de que no debían hacer concesiones en la lucha sin garantías de respuestas concretas. El viernes por la noche intentaron llevarse la última carga que quedaba de materia prima pero los trabajadores se organizaron rápido, se hicieron presentes de manera urgente en la planta y lo impidieron.
Como se observa más arriba, la fecha del comunicado de la empresa al sindicato es del 11 de julio, es decir, de este lunes, y no del martes cuando se hicieron públicos los despidos.
Hoy a las
13 horas se desarrollará una audiencia entre las partes en conflicto en la
subsecretaría de Trabajo en Trelew. Lo más probable es que la empresa no se
presente o envíe algún responsable menor y no dé el brazo a torcer.
Más tarde,
en asamblea los trabajadores decidirán cómo continuar. Seguramente se decida endurecer los métodos de lucha. Es clave para triunfar arrancarle un paro
general al STIA con una movilización masiva por las calles de la ciudad
capital. Para que la lucha triunfe, además, debe dotarse de la solidaridad de
todo el pueblo rawsense y de las ciudades de alrededores. En otras
oportunidades la conducción del STIA ha sido el mayor obstáculo para que las
luchas se masifiquen. Fabián Molina y Luis Núñez, sus máximos dirigentes,
buscaron por todos los medios aislar en procesos anteriores a los trabajadores
del resto de las organizaciones sociales y del pueblo. Este camino conducirá a
una derrota. Las bases de la pesca deben organizarse de manera independiente de
la burocracia sindical y del Gobierno para triunfar. ¡VIVA LA LUCHA DE LOS/AS
OBREROS/AS DE FYRSA!
No hay comentarios:
Publicar un comentario